Los pájaros elefantes, los más grandes jamás vistos, eran nocturnos y quizás ciegos.

Según la investigación, este tipo de espécimen vivía en Madagascar, no volaba y aparentemente fue exterminado por humanos entre 500 y 1,000 años atrás.

En un estudio publicado en Actas de la Royal Society B, Los biólogos de la Universidad de Texas descubrieron que el ave elefante, la ave más grande que ha vivido, era nocturna y casi ciega. Para llegar a esta conclusión, Los investigadores reconstruyeron y analizaron los cerebros de esta especie.

Según la investigación, este tipo de espécimen vivía en Madagascar, no volaba y aparentemente fue exterminado por humanos entre 500 y 1,000 años atrás. Además, Descubrieron que las aves pesaban 400 kg y medían tres metros, convirtiéndose en las más grandes del planeta.

Aunque hay muy poca información sobre esta especie, conocida como Aepyornithidae, Los biólogos han afirmado que los parientes más cercanos de esta ave fueron los kiwis de Nueva Zelanda, conocidos por su mala vista y buen olfato. (Leer: los gorilas paternos machos son más atractivos para las hembras)

Los esqueletos de estas aves se guardan en el Museo Nacional de Historia Natural de París.

Los biólogos que lideraron esta investigación, Christopher Torres y Julia Clarke, estudiaron la estructura cerebral del ave elefante para aprender sobre sus hábitos. Para hacer esto, utilizaron una tomografía computarizada y crearon reconstrucciones digitales del cerebro llamadas endocast. Con este análisis, descubrieron que la corteza visual de esta especie se reducía significativamente en comparación con otras.

"El estudio de la forma del cerebro es una forma muy útil de relacionar la ecología (la relación entre el ave y el medio ambiente) y la anatomía, descubrimientos que nos proporcionan un gran vistazo a la vida de estas aves extrañas e incomprendidas ", dijo Torres.

Los científicos habían asumido previamente que los pájaros elefantes eran similares a otros pájaros grandes que no volaban, como los emúes y avestruces, y que estaban activos durante el día y tenían buena vista. Pero, a través de la reconstrucción de sus cerebros, revelaron que Esta especie tenía un estilo de vida diferente. (Puedes leer: los arqueólogos descubren entierros humanos de 3.000 años en Cusco)