Hannah Gadsby, la actriz que dejó el stand con el especial que le dedicó

Gadsby aborda con honestidad sus inseguridades. Creció en una pequeña ciudad en Tasmania, donde fue dos veces campeón de golf. Comenzó a practicar deporte de niña, en un pequeño club donde su madre trabajaba como empleada de limpieza y donde no se les permitía a las mujeres ser socias completas: no podían jugar solo unos pocos hoyos. A veces tenían que dejar de jugar para servir el té a los socios.

Incluso en el circuito de competición, Gadsby se dio cuenta del lugar de la mujer. Cuando su hermano ganó un torneo, le dieron un equipo completo de golf para animarlo a continuar practicando. "Me dieron utensilios de cocina para poder completar la dote", recuerda sarcásticamente

. Luego estudió la historia del arte y la conservación en la Universidad Nacional de Australia de Canberra. Trabajó en una librería y como proyeccionista al aire libre. Finalmente, se convirtió en una golondrina rural: estaba a la deriva.

Cuando cumplió 30 años, tuvo el impulso de inscribirse en un concurso de micrófono abierto patrocinado por el Melbourne Comedy Festival. Fue una decisión rara, pero en ese momento, tomé muchas decisiones como esta. En ese momento, también era un
sin hogar .

Gadsby sabía que era gracioso. "Fue mi forma de participar en la vida sin ser parte de ella", dice. La primera vez que estuvo frente al micrófono, hizo una rutina totalmente surrealista sobre
frizar un perro muerto. "¡El mío siempre fue muy bueno!"

Llegó a la final del concurso y se sintió extrañamente cómodo en el escenario. "Las interacciones personales con la gente me asustan, pero puedo hablar con una sala llena de gente sin ningún problema, supongo que tengo cables cruzados", dice Gadsby.

Generando complicidad con el público

Uno de los aspectos más ingeniosos del comediante es la forma en que lanza bromas al público mientras habla de las cosas más dolorosas y perturbadoras de su vida, involucrando así al público en la deconstrucción de la audiencia. seductive power of comedy

"Creo que la magia del show de Gadsby es que es divertido, y luego convierte lo gracioso en un medio", dice el comediante y cineasta Mike Birbiglia (que también tiene su propio especial en Netflix,
Gracias a Dios por los chistes ). "Al escuchar frente al micrófono, uno se da cuenta de que puede ser divertida todo el tiempo, pero que en un momento decidió dejar de ser graciosa". y decir algo más ".

Algunos puristas de la comedia dicen que
Nanette – el espectáculo lleva el nombre de un barista que ha estado mirando durante mucho tiempo – no es "de pie" a pesar de que es tan promovido. Según ellos, los chistes faltan. Birbiglia dice que también hizo shows en los que se sumergió en sus miserias personales, y que esta tendencia es parte de una movida stand-up más grande, para apuntar más alto o más profundo. "Es una invitación a pensar, a ir más allá". Funcionó para mí y para muchos otros comediantes ", dice Birbiglia.

Pero Gadsby ha refutado estas críticas en Twitter: "QUIERO DEJAR LA CLARA: Mi show no es una comedia de pie, porque el stand up es una forma de entretenimiento". arte creado por los hombres y para los hombres, y los artistas en general desafían los géneros. "

En
Nanette ,
da una larga digresión sobre la misoginia de Pablo Picasso, vinculándola a la de Donald J. Trump. (Esto se debe, explica, a su mente autista, que trabaja en busca de modelos) Sus primeras rutinas
de pie eran autobiográficos pero no tan cerebrales, con mordazas sobre su peso y sobre su homosexualidad. Trabajó en el circuito de clubes de comedia en Australia e Inglaterra, pero no pasó un buen momento. "No es seguro para una mujer, no estoy interesado en hablar con hombres borrachos, lo hice cuando era una niña pequeña" en sus años en Tasmania . "No me gustó".

Algunos de los objetivos de sus observaciones son Bill Cosby, condenado por abuso sexual, y Harvey Weinstein, acusado de acoso y violación. Sentados en la mesa del comedor, también hablamos sobre Louis CK, cuyo estilo cómico ni siquiera le interesaba antes de confesar que se había masturbado varias veces frente a sus colegas femeninas. . El éxito de Nannette, explica, confirma que existe "una gran demanda de otros tipos de voces". Mencionó a Louis C.K y la posibilidad de que pudiera regresar al escenario. "No quiero detenerlo", dice, "vale la pena esperar y ver si todavía tiene una audiencia".

Quedan 18 segundos en mi grabadora. No esperaba lo que sucedió después. Hannah Gadsby, por supuesto, tenía algo más en mente. "Si resulta que Louis C.K tiene una audiencia hoy, entonces no voy a dejar el stand-up", dijo con una sonrisa. "Puedes citarme con esta promesa, si Louis CK tiene una audiencia, no abandonaré la comedia, porque significa que mi trabajo no ha terminado, escribí que estoy Dije con una sonrisa traviesa "y se levantó. 19659012] Traducción de Jaime Arrambide